Cuando la vida te da limones, haz… agua de desintoxicación.
Al menos, así debería ser el viejo adagio. Por supuesto, los limones son agrios, amargos y muy ácidos; no son precisamente un tentempié apetecible por sí mismos. Pero también están repletos de vitaminas y antioxidantes, lo que los convierte en una de las frutas más saludables del planeta.
Aunque los cítricos saben mucho mejor mezclados con agua y una tonelada de azúcar, la limonada no es precisamente buena para ti (lo siento Beyoncé). Por suerte, hay formas más sanas de disfrutar de sus bondades amarillas: exprime uno en un vaso de agua caliente o fría, añade zumo de limón fresco a los aliños de las ensaladas o ralla la piel para obtener ralladura de limón fresco. Toda la fruta, desde la cáscara hasta la pulpa, es buena para ti, por lo que nuestros editores de ¡Come esto, no aquello! investigaron exactamente lo que ocurre cuando te comes uno. Y para descubrir aún más consejos para adelgazar el estómago, echa un vistazo a estas 55 mejores maneras de aumentar tu metabolismo!
Parece más joven
No malgastes tu dinero en costosas cremas faciales o tratamientos de spa; añadir un poco de limón a tu dieta podría ser todo lo que necesitas para conseguir un brillo juvenil. Según un estudio de The American Journal of Clinical Nutrition, el consumo elevado de vitamina C se asoció a una menor probabilidad de desarrollar arrugas y a una menor sequedad de la piel; dos rasgos físicos que pueden envejecer a lo grande. Dado que un limón contiene aproximadamente la mitad de la cantidad diaria recomendada de vitamina C, abastecerse de este cítrico le hará inmortal… o al menos, parecerlo.
Su presión arterial baja
La presión arterial alta puede provocar cosas tan temibles como una insuficiencia renal, un ataque al corazón o un derrame cerebral. Por suerte, se ha demostrado que comer limones regularmente ayuda. Las personas que comieron al menos medio limón al día, junto con caminar unos 7.000 pasos, aumentaron considerablemente sus niveles de presión arterial, según un estudio publicado en el Journal of Nutrition and Metabolism. Aunque los limones no deberían ser el único tratamiento para algo tan serio como la presión arterial alta, es un beneficio prometedor para la salud; un limón al día podría mantener al médico alejado.