Cuando era adolescente, estaba enamorado de una chica en la escuela. Era alta, bonita y tenía el pelo rubio suelto, y la gente la trataba como la celebridad del colegio. Un día me atreví a preguntarle si le estaba gustando un libro que ambos estábamos leyendo para la clase de literatura. Cuando me acerqué, se estaba burlando de otra chica con mucha maldad y utilizando un lenguaje soez. Tenía las uñas sucias y olía a cenicero. El hechizo se rompió y perdí todo el interés.
La cuestión es que cuando un hombre se siente atraído por una mujer, se fija en mucho más que en su atractivo sexual.
La amabilidad
Lo primero que me llamó la atención fue que ella estuviera siendo tan mala con otra persona. Me repugnó al instante que esa crueldad pudiera salir de esa persona. La bondad es importante. Es algo hermoso cuando hay tal abundancia de buena voluntad en alguien que encuentra su camino hacia afuera – naturalmente.
Autoestima
¿Qué tan fuerte es la autoestima de alguien si siente la necesidad de degradar o meterse con otros? No mucho. Alguien con autoestima puede velar por sus propios intereses, pero no a expensas de los demás.
Un comunicador brillante
Alguien que salpica cada conversación con un lenguaje ruidoso y soez no se siente como alguien a quien podrías llevar a casa con mamá o a un restaurante agradable y tranquilo. La gente se aleja de las personas ruidosas y malhabladas porque sugiere que no son muy brillantes. En cambio, cuando una mujer habla con claridad y muestra una inteligencia segura, es un activo para la relación.
Misterio
Hay una razón por la que nos atrae lo desconocido. Estimula nuestra curiosidad natural y excita nuestros sentidos. Una mujer que parece tener muchas capas bajo la superficie activa nuestra imaginación. Incluso si en realidad no tiene muchas capas, retenga cuando sea posible y comparta, no tanto con vacilación, sino más bien, lentamente.
Elegancia
La elegancia parece una palabra antigua. Le pregunté a mi madre cómo la definiría. La mujer elegante cuida -pero no se obsesiona- su aspecto, su higiene y sus modales. Pretende que la gente se sienta bienvenida y cómoda a su alrededor porque es limpia, educada y atenta.
Sentido del humor
La vida es un reto, pero tener sentido del humor significa que puedes encontrar el punto positivo en los momentos difíciles. Una mujer sonriente capta una sensación de fantasía en un hombre: él la imagina feliz, algo que es de gran importancia para un buen hombre.
El brillo de su pelo puede llamar nuestra atención desde lejos, pero los rasgos que nos hacen acercarnos van mucho más allá de las apariencias.