ALGUNOS MEDICAMENTOS COMÚNMENTE MAL USADOS EN EL TERCER MUNDO

ADRIAMICINA – Este agente quimioterapéutico tóxico se vendía como antibiótico en un estante junto a antibióticos como la estiromicina por un vendedor ambulante en Rangún, Birmania, en 1979. Los medicamentos se vendían para las mismas dolencias simplemente porque los nombres se parecían.

ACTATO DE CLORAMADINONA – Prohibido en EE.UU. y Canadá porque contiene pentazocina (talwin), que se considera adictiva. Las etiquetas de cuatro marcas vendidas en América Latina afirman que la droga no produce dependencia física ni psicológica.

CLORAMFENICOL – Un antibiótico, esta droga se utiliza raramente en los países industrializados; en el Tercer Mundo se ha utilizado liberalmente para infecciones comunes cuando hubiera sido preferible utilizar antibióticos menos tóxicos. Se dice que causa anemia aplástica (una enfermedad sanguínea mortal) en uno de cada 20.000-40.000 casos. Se culpó a su uso de la muerte de 20.000 personas en 1972-73 cuando se produjo una epidemia de tifus en Ciudad de México. Se creía que el cloranfenicol era la cura para la fiebre tifoidea y 100.000 enfermos fueron tratados con él. Unas 20.000 murieron cuando se demostró su ineficacia debido a que el uso libre del medicamento había producido una cepa de tifoidea resistente.

No se indicaron los peligros en los productos vendidos en Colombia y Ecuador. En América Latina, el medicamento se promociona y se utiliza para enfermedades tan triviales como el acné y el pie de atleta.

Nueve marcas se venden en Malasia y 30 en Tailandia. Los anuncios destacan su versatilidad; una marca de Tailandia sugiere el medicamento para 50 afecciones, entre ellas el sarampión, la varicela, la amigdalitis y las enfermedades de la piel. En África y Asia el fármaco se recomienda para se vende libremente. No hay controles en el etiquetado, el envasado o la indicación de la fecha de caducidad.

Cloroformo – Los productos que contienen cloroformo están prohibidos en EE.UU., Canadá y la mayor parte de Europa porque se han relacionado con daños hepáticos y renales en los seres humanos. En Malasia, el cloroformo se encuentra en al menos 6 mezclas para la tos y en 2 marcas de pasta de dientes.

CLIOQUINOL/ENTEROVIOFORM/MEXASE/MEXAFORM – En la década de 1960, este medicamento antidiarreico se relacionó con la neuropatía mielo-óptica subaguda (SMON), una enfermedad del sistema nervioso incapacitante y a veces mortal que provoca ceguera, otros trastornos oculares y parálisis de los pies y las piernas. En Japón, la SMON alcanzó proporciones epidémicas, afectando a unas 10.000 a 20.000 personas. Se descubrió que el responsable era el clioquinol, tomado en dosis normales o altas durante largos periodos de tiempo.

En Perú, se informa de que los padres dan el medicamento a sus hijos semanalmente. Aunque el medicamento está prohibido en varios países y muy restringido en otros, sigue estando disponible, bajo 14 marcas diferentes con 13 juegos de instrucciones diferentes (una marca no contiene instrucciones). Ciba-Geigy, el principal fabricante, factura 40 millones de dólares al año.

CLONIDINA – Vendida como Catapres, este medicamento puede controlar la presión arterial alta. Si el medicamento se retrasa 12 horas o más después de su administración, puede provocar una presión arterial extremadamente alta e incluso una hemorragia cerebral. En algunos países del Tercer Mundo no hay ninguna advertencia en la etiqueta.

DIANABOL/METANDROSTENOLONA – Este esteroide anabólico está severamente restringido en los Estados Unidos y contraindicado para mujeres embarazadas, madres lactantes y niños. Se sabe que atrofia el crecimiento de los niños y que provoca cambios de sexo permanentes en las niñas. En Colombia, el Dianabol se vende como estimulante del apetito para los niños. El equivalente africano de la Physician’s Desk Reference dice que la droga es para la «promoción del crecimiento en niños subdesarrollados». Las dosis recomendadas para los niños también aparecen en los manuales de los médicos asiáticos y mexicanos, pero no se mencionan sus posibles peligros.

DIPYRONA – Prohibida en los Estados Unidos y en gran parte de Europa Occidental porque puede causar un daño sanguíneo grave o mortal llamado agranulocitosis – una enfermedad que disminuye la capacidad del cuerpo para producir glóbulos blancos para combatir las infecciones. La dipirona se utiliza en el Tercer Mundo para combatir el dolor y la fiebre; es un analgésico tan eficaz como la aspirina.

El fármaco se vende sin receta, en quioscos de periódicos e incluso en bares, en Mozambique, Brasil, México, Centroamérica, la República Dominicana y Colombia. Hay más de 100 marcas que se venden en América Latina, 20 en Malasia, 28 en Tailandia y 9 en Tanzania. Algunas marcas llevan advertencias, pero muchas no. En 1976, un médico británico informó de que en Tanzania se vendía una cantidad suficiente de dipirona como para que murieran 630 personas. (Se dice que 1 de cada 100 consumidores de dipirona contrae agranulocitosis, de los cuales la mitad muere). Aunque la dipirona fue supuestamente retirada del mercado en Bangladesh en 1980, los estudios demuestran que los fabricantes gastaron 140.000 dólares en publicidad ese año para despejar estas existencias.

FRUSEMIDA/FUROSEMIDA/LASIX – Un medicamento que reduce el exceso de líquido en el cuerpo, puede causar deshidratación y se sospecha que provoca defectos de nacimiento. En Bangladesh, un representante de una empresa farmacéutica intentó convencer a un médico de que utilizara el fármaco en niños desnutridos que padecían kwashiokor, una enfermedad que hace que el cuerpo retenga líquidos.

HEXACLOROFENO – Este fármaco arrasó en el mercado estadounidense en la década de 1960, cuando se utilizó en pastas de dientes, desodorantes, polvos para bebés y sprays de frutas y verduras. En un año se obtuvieron 53 millones de dólares sólo en sprays vaginales. En 1972 el talco para bebés fue considerado responsable de una extraña enfermedad neurológica que causó la muerte de más de 30 bebés en Francia. Al parecer, esta droga puede absorberse a través de la piel, y las pruebas demostraron que dosis minúsculas suministradas a ratas podían producir importantes daños cerebrales. Tan pronto como los EE.UU. marcaron la droga «sólo con receta», un jabón líquido de Winthrop Products, Fisohex (Phisohex), que contiene hexacorofeno se puso a la venta en Colombia, donde ahora es uno de los jabones líquidos más populares.

LOMOTIL – Un eficaz medicamento antidiarreico vendido con receta en los EE.UU.. Sin embargo, las dosis ligeramente superiores a las recomendadas pueden ser mortales. En el Sudán, el medicamento se vendía sin receta en envases que presumían de haber sido «utilizado por los astronautas durante los vuelos espaciales Gemini y Apolo». También se recomendaba para niños de hasta 12 meses.

PANALBA/ALBAMYCIN-T – Un antibiótico combinado, comercializado por primera vez por Upjohn en 1957. En 1968, las ventas de este producto ascendían a 18 millones de dólares, es decir, el 12% de los ingresos brutos de la empresa. Pero en 1968, 30 expertos de la Academia Nacional de Ciencias recomendaron por unanimidad que el panalba, junto con otros 49 antibióticos, fuera retirado del mercado estadounidense. Según sus estudios, el 20% de los pacientes desarrollaban reacciones alérgicas al medicamento. Doce pacientes ya habían muerto como consecuencia de ello. En 1970, se obligó a retirarlo del mercado estadounidense. Sin embargo, los antibióticos no están clasificados como medicamentos en EE.UU., lo que permite exportar la sustancia, ahora con el nombre de Albamicina-T, a 33 países. En México se recomienda para las infecciones urinarias; no se menciona la toxicidad ni los efectos secundarios.

FENACATINA/SOMA/FIORINAL – Este medicamento provoca una insuficiencia renal que a menudo resulta mortal. Se vende en Malasia para dolencias menores como el dolor de muelas, la gripe y el dolor de cabeza.

TETRACYCLINE – En los países industrializados, este antibiótico no se utiliza en niños menores de 8 años ni en mujeres embarazadas de más de 4 meses. Si se utiliza en grandes dosis durante más de una semana, el fármaco retrasa el desarrollo óseo del feto y mancha los dientes de los niños. En 1979, en Singapur y Malasia, se vendían 42 preparados, sin receta, y sólo 2 incluían alguna precaución. La marca de Bristol, Bristaciclina, se vende en Colombia sin advertencia a las mujeres embarazadas, y se recomienda para los niños. En otros países del Tercer Mundo el medicamento se recomienda para bebés y niños.

VERDIVITON – Este medicamento está restringido en Gran Bretaña y contraindicado para cualquier persona con problemas de hígado. En Bangladesh, donde entre el 50 y el 60 por ciento de la población padece hepatitis amebiana u otras enfermedades del hígado, el medicamento está contraindicado para la mayoría de la población. Sin embargo, está disponible allí sin advertencias.

WINSTROL/STANOZOLOL – Una hormona masculina sintética restringida en los Estados Unidos porque atrofiaba el crecimiento de los niños. Está destinado a ser utilizado sólo para los trastornos de la sangre en los adultos. Sin embargo, el medicamento se vende sin receta en Brasil, donde se recomienda como estimulante del apetito para los niños. En México se vende como tónico. En Malasia se vende para tratar la pérdida de peso y la anorexia en todos los grupos de edad.

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