«La primera vez que vino trajo una cosa que parecía una batería de coche», explicó Johnson. «Me dije: ‘¿Qué demonios es eso?’ Me dijo: ‘Vamos a miniaturizarla’. Tardó dos años y medio. Venía una vez al mes. Nos sentábamos allí y era aburridísimo con todos esos cables y pantallas de ordenador y ruidos. Pero mereció la pena».
La ciencia exacta que se esconde tras el tratamiento es una especie de misterio, y Johnson sólo está dispuesto a divulgar un mínimo de información: «Lo único que puedo decir es que utiliza la estructura ósea del cráneo como receptor. Eso es todo lo que puedo decirte».
Más importante que los detalles del procedimiento en sí, el hecho es que parece haber funcionado. Johnson mantuvo a sus compañeros de banda al tanto de su evolución y, cuando Angus Young decidió volver a reunir al grupo para un nuevo álbum, el cantante estuvo a la altura.
«Nos poníamos al día de cómo le iba y todo eso», señaló Young. «Era muy bueno. Sé que para Brian esto forma parte de su vida. Es lo mismo que para el resto de nosotros».
Grabado a finales de 2018 y principios de 2019, el nuevo álbum de AC/DC -según se informa, titulado Power Up- será el duodécimo en contar con Johnson como vocalista. La banda esperaba girar el lanzamiento en 2020, antes de que el coronavirus paralizara la industria musical. Aun así, los legendarios rockeros pudieron ensayar un gran concierto antes de que la pandemia se desatara.
«Fue con los chicos en plenas condiciones de campo de batalla y fue sensacional, brillante», admitió Johnson. «Me sentí como si fuera un niño otra vez».