Cómo debatir en la escuela

Participar en debates puede enseñarte a investigar un tema, a pensar de forma crítica y a hablar con convicción. Estas son grandes habilidades que debes aprender mientras estás en la escuela.

Tipos de debates

Mientras estés en la escuela es posible que te pidan que participes en diferentes tipos de debates. Lo más probable es que esto ocurra en más de una ocasión. El entorno, el público y el tema influirán en la forma que elijas para formatear tu argumento y presentar tu caso.

Debates en el aula

Los debates en el aula tendrán lugar principalmente frente a tus compañeros. En este sentido, es importante tener en cuenta cómo responderán tus compañeros a tu argumento durante el debate. Gánate a la mayoría de ellos con tu punto de vista mediante:

  • Usando un lenguaje informal
  • Estando bien preparado
  • Expirando confianza aunque te sientas nervioso
  • Conectando con ellos durante tus argumentos centrales o refutaciones
  • Usando ejemplos relacionables

Equipo de debate

Es probable que el equipo de debate sea un poco más intenso y desafiante en comparación con los debates en el aula. Si estás en el equipo de debate, ten en cuenta:

  • Tu oponente puede ir a la yugular, así que asegúrate de estar excesivamente preparado para declaraciones o ataques más dirigidos.
  • Es probable que cuente con la ayuda y el apoyo de los miembros que coinciden con su perspectiva, así que asegúrese de utilizarlos como recursos.
  • Tu oponente puede utilizar tácticas para desviarte del camino, así que cíñete a tu argumento central y no permitas que te distraigan.
  • Usa tu tiempo sabiamente y asegúrate de transmitir tus puntos principales. Puede limitar sus puntos principales a un máximo de tres con argumentos de apoyo.

Debates durante una reunión del club o del consejo estudiantil

Las reuniones del club o del consejo estudiantil pueden permitir un entorno de debate más informal. Es posible que estos debates no tengan lugar detrás de un podio, pero aun así querrás transmitir tu punto de vista con claridad. Para prepararse para un debate durante una reunión del club o del consejo estudiantil, asegúrese de:

  • Centrarse en el tema específico y ser consciente de no desviarse de su punto.
  • Puede que no haya un mediador, así que asegúrate de ser respetuoso con las opiniones de los demás a lo largo de la discusión.
  • Si los individuos más ruidosos o más asertivos lo están agobiando, es posible que tenga que salir de su zona de confort y asegurarse de que se escuche su punto de vista. Puedes decir: «Entiendo lo que dices, pero mi perspectiva es un poco diferente».
  • Asegúrate de aclarar el punto de tu oponente antes de exponer tu caso. Así se sentirán escuchados, y usted tendrá una refutación más sólida.

Seleccionar el tema de debate adecuado

El tema de debate ideal es algo que te apasione. De este modo, te resultará más fácil hablar de él y hacerlo con confianza. También tendrás un gran conocimiento del tema, o disfrutarás de verdad investigando sobre él. Para encontrar el tema de debate adecuado para ti:

  • Pregúntate qué temas te interesan más y por qué.
  • Piensa en lo que te gusta hablar, investigar o pensar.
  • Considera diferentes ángulos y perspectivas una vez que hayas acotado el tema.
  • Si te han asignado un tema que no te gusta especialmente, piensa en cómo puedes relacionarlo con algo que sí te gusta.
  • Investiga algunas perspectivas diferentes sobre el tema y explora lo que más te interesa del mismo.
  • Piensa en los pros y los contras de la selección de tu tema, así como en cómo podrían ser las refutaciones de tu oponente.

Investigar su argumento

Investigar su argumento puede ayudarle a comprender plenamente los conceptos que intenta transmitir a su audiencia o mediador. Para profundizar en su tema:

  • Busque en Google artículos de investigación recientes o revistas de prestigio que traten su tema.
  • Entreviste a personas que sean relevantes para su caso y tome notas.
  • Explora tu tema desde diferentes perspectivas y pregunta a compañeros, profesores y otros adultos cuál es su opinión sobre el tema.
  • Préstese, saque o compre libros que le ayuden a avanzar en sus argumentos o a entender mejor los de su oponente.

Prepárese para contrarrestar el argumento de su oponente

Para negar a fondo lo que argumenta su oponente, tendrá que sumergirse en su perspectiva, sus argumentos principales y sus refutaciones. Una vez que tengas una idea de lo que es probable que digan y contrarresten tus argumentos, podrás preparar mejor tu postura defensiva. Piensa en varias refutaciones que tengan pruebas sólidas que las respalden. Si te cuesta saber por dónde empezar, explora lo opuesto a los argumentos de tu oponente e inventa algunos hechos que apoyen esta posición. Haga unos cuantos y elija los más fuertes como sus argumentos centrales de refutación.

Enfocando su argumento

Los argumentos fuertes son sucintos, son fáciles de digerir para la audiencia y tienen varios ejemplos relacionables. Elabore una lista de sus datos de apoyo y aísle algunos de los más fuertes para que sean sus argumentos principales. Utiliza estos pocos argumentos principales para organizar los detalles de apoyo, los hechos y los ejemplos que los refuercen.

Cómo actuar bien durante el debate

Tu estilo de debate variará según el tipo de escenario en el que participes. Debatir puede parecer un reto al principio, pero con mucha práctica y una preparación adecuada, tienes muchas posibilidades de hacerlo con aplomo, confianza y convicción.

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