Los adultos con TDAH pueden sufrir una reacción extrema al rechazo percibido. Según el doctor William Dodson:
«La disforia sensible al rechazo (RSD) es una sensibilidad emocional extrema y un dolor emocional desencadenado por la percepción -no necesariamente la realidad- de que una persona ha sido rechazada, burlada o criticada por personas importantes en su vida. El RSD también puede ser desencadenado por una sensación de fracaso, o de no estar a la altura de sus propios estándares o de las expectativas de los demás».
La palabra disforia es de origen griego y significa «difícil de soportar». en este contexto, significa que la respuesta emocional al rechazo percibido les duele mucho más que a las personas sin TDAH. Tener TDAH parece aumentar significativamente el riesgo de padecer RSD. Hay varios factores que pueden contribuir a ello:
- El sistema nervioso central tiende a desencadenarse de forma diferente en los individuos con TDAH.
- Las personas con TDAH pueden tener a veces comportamientos que los sitúan fuera de las normas sociales típicas. Por lo tanto, esto podría crear situaciones en las que las personas con TDAH perciben señales de que son vistas como «otras», lo que crea un círculo vicioso.
- La tendencia a la impulsividad que suele acompañar al TDAH puede hacer que alguien interactúe de forma que sabotee aún más sus interacciones sociales.
La afección puede manifestarse de dos maneras.
- La respuesta emocional se dirige hacia el interior: el TDAH puede imitar un trastorno del estado de ánimo completo y grave, incluidos los pensamientos de suicidio. El cambio rápido de sentirse perfectamente bien a sentirse intensamente triste que resulta del RSD se diagnostica a menudo erróneamente como trastorno bipolar de ciclo rápido. Los médicos pueden tardar en reconocer que estos síntomas están causados por los cambios emocionales repentinos asociados al TDAH y a la sensibilidad al rechazo, mientras que el resto de las relaciones objetales parecen completamente normales.
- La respuesta emocional se dirige hacia el exterior: el RSD parece una rabia instantánea contra la persona o la situación responsable de causar el dolor. De hecho, las investigaciones muestran que el 50% de las personas a las que se les asigna un tratamiento de control de la ira por mandato judicial tienen un TDAH no reconocido previamente.
El RSD puede hacer que las personas con TDAH esperen el rechazo, incluso cuando éste no es nada seguro. El rechazo es intensamente doloroso y se desencadena por la pérdida percibida o real de aprobación, amor o respeto. La respuesta de afrontamiento de los individuos con TDAH puede incluir:
- Convertirse en «complacientes de la gente» – Examinan a cada persona que conocen para averiguar lo que esa persona admira y elogia. Entonces, ese es el falso yo que presentan. A menudo esto se convierte en un objetivo tan dominante que olvidan lo que realmente querían de sus propias vidas. Están demasiado ocupados asegurándose de que los demás no estén disgustados con ellos.
- Dejar de intentarlo – Si existe la más mínima posibilidad de que una persona pueda intentar algo nuevo y fracasar o quedarse corta delante de cualquier otra persona, es demasiado doloroso y demasiado arriesgado como para siquiera considerarlo. Así que estos individuos simplemente no lo hacen. Son personas muy brillantes y capaces que no hacen nada con sus vidas porque hacer el esfuerzo les produce mucha ansiedad. Renuncian a las interacciones sociales, a las relaciones, a las solicitudes de empleo o a presentarse a las reuniones.
- Utilizan el dolor del trastorno de estrés postraumático para superar sus logros: trabajan constantemente para ser los mejores en lo que hacen y permanecer irreprochables. Esto puede significar luchar por la perfección, que nunca es alcanzable, y están constantemente impulsados a lograr más.
La disforia por sensibilidad al rechazo tiene una base neurológica y genética, y casi el 100% de las personas con TDAH experimentan algún nivel de sensibilidad al rechazo. Actualmente, la condición se trata con medicamentos. La psicoterapia ha demostrado ser menos eficaz para los pacientes con RSD porque las emociones intensas se producen de forma repentina y abruman por completo la mente y los sentidos. Una persona con RSD puede tardar algún tiempo en recuperarse después de un episodio.
La revista ADDitude ofrece un autotest que puedes realizar para saber si puedes tener RSD.