El capitalismo es un sistema económico en el que las entidades privadas son dueñas de los factores de producción. El capitalismo se define como un sistema económico en el que el comercio, la industria y los beneficios de un país están controlados por empresas privadas, en lugar de por las personas cuyo tiempo y trabajo impulsan esas empresas. Estados Unidos y muchas otras naciones del mundo son países capitalistas, pero el capitalismo no es el único sistema económico disponible; a lo largo de la historia, otros países han adoptado otros sistemas, como el socialismo o el comunismo.
En una economía de mercado capitalista, la toma de decisiones y las inversiones están determinadas por cada propietario de riqueza, bienes o capacidad de producción en los mercados financieros y de capitales, mientras que los precios y la distribución de bienes y servicios están determinados principalmente por la competencia en los mercados de bienes y servicios. Los cuatro factores son el espíritu empresarial, los bienes de capital, los recursos naturales y el trabajo. Los propietarios de los bienes de capital, los recursos naturales y el espíritu empresarial ejercen el control a través de las empresas.
Los economistas, sociólogos e historiadores han adoptado diferentes perspectivas en sus análisis del capitalismo y han reconocido varias formas del mismo en la práctica. Entre ellas se encuentran el capitalismo de libre mercado, el capitalismo del bienestar y el capitalismo de Estado. La mayoría de las economías capitalistas existentes son economías mixtas que combinan elementos de libre mercado con la intervención del Estado y, en algunos casos, con la planificación económica.
Los críticos del capitalismo argumentan que establece el poder en manos de una clase capitalista minoritaria que existe a través de la explotación de la clase obrera mayoritaria y de su trabajo. Prioriza el beneficio sobre el bien social, los recursos naturales y el medio ambiente; y es un motor de desigualdad, corrupción e inestabilidad económica.
Durante la Revolución Industrial, los industriales sustituyeron a los comerciantes como factor dominante en el sistema capitalista y afectaron al declive de las habilidades artesanales tradicionales de artesanos, oficiales, etc. También durante este periodo, el excedente generado por el auge de la agricultura comercial fomentó una mayor mecanización de la agricultura. El capitalismo industrial marcó el desarrollo del sistema fabril de manufacturas, caracterizado por una compleja división del trabajo entre y dentro del proceso de trabajo y la rutina de las tareas laborales.
Impacto del capitalismo en las personas:
El tipo de impacto que tiene el capitalismo en tu vida depende de si eres un trabajador o un jefe. Para alguien que posee una empresa y emplea a otros trabajadores, el capitalismo puede tener sentido. Cuantos más beneficios obtenga tu empresa, más recursos tendrás para compartir con tus trabajadores, lo que teóricamente mejora el nivel de vida de todos. Todo se basa en el principio de la oferta y la demanda, y en el capitalismo el consumo es el rey. El capitalismo adopta la posición de que «la avaricia es buena», lo que sus partidarios dicen que es algo positivo: la avaricia impulsa los beneficios y los beneficios impulsan la innovación y el desarrollo de productos, lo que significa que hay más opciones disponibles para quienes pueden permitírselas.
¿Por qué la gente se opone al capitalismo?
Los anticapitalistas ven el capitalismo como un sistema inhumano, antidemocrático, insostenible y profundamente explotador que debe ser desmantelado. Lo ven como algo intrínsecamente opuesto a la democracia debido a que los jefes capitalistas tienen poder sobre los trabajadores en el lugar de trabajo y al hecho de que, cuanto más capital se acumula, más poder tienen.
¿Cuál es la diferencia entre el capitalismo y el socialismo?:
El capitalismo y el socialismo se consideran generalmente como polos opuestos, y las discusiones sobre cualquiera de los dos sistemas se enmarcan a menudo en oposición al otro. Hay muchas formas de socialismo, pero en su raíz, el socialismo es un sistema económico en el que toda una comunidad -no sólo los jefes o las empresas privadas- controla los medios de producción por igual. Asume que las personas son naturalmente cooperativas, en lugar de competitivas. Los capitalistas, críticos del socialismo, creen que el sistema frena el crecimiento económico y premia la pereza de los trabajadores. En un país capitalista, la atención se centra en los beneficios por encima de cualquier otra cosa. En un país socialista, se considera que el público es más importante, y el bienestar social es una de las principales prioridades. Estados Unidos, el Reino Unido y Alemania son ejemplos de países capitalistas modernos. Por el contrario, India y Cuba son ejemplos de países socialistas modernos, no capitalistas, al igual que la antigua Unión Soviética.
Pros del capitalismo:
Libertad económica: Ayuda a la libertad política. Si los gobiernos son dueños de los medios de producción y fijan los precios, esto conduce invariablemente a un estado poderoso y crea una gran burocracia que puede extenderse a otras áreas de la vida.
Eficiencia: Las empresas en una sociedad basada en el capitalismo se enfrentan a incentivos para ser eficientes y producir bienes que tengan demanda. Estos incentivos crean presiones para reducir costes y evitar el despilfarro. Las empresas estatales suelen ser más ineficientes.
Innovación: El capitalismo tiene una dinámica en la que los empresarios y las empresas buscan crear y desarrollar productos rentables. Por lo tanto, no se estancan sino que invierten en nuevos productos que pueden ser populares entre los consumidores. Esto puede conducir al desarrollo de productos y a una mayor oferta de bienes.
Crecimiento económico: Al tener las empresas y los individuos incentivos para ser innovadores y trabajar duro, se crea un clima de innovación y expansión económica. Esto contribuye a aumentar el PIB real y a mejorar el nivel de vida. Este aumento de la riqueza permite un mayor nivel de vida.
Contra del capitalismo:
Poder de monopolio: La propiedad privada del capital permite a las empresas obtener un poder de monopolio en los mercados de productos y de trabajo. Las empresas con poder de monopolio pueden explotar su posición para cobrar precios más altos.
Beneficios sociales ignorados: Un mercado libre ignorará las externalidades. Es probable que una empresa capitalista que maximiza el beneficio ignore las externalidades negativas, como la contaminación de la producción; esto puede perjudicar el nivel de vida. Del mismo modo, una economía de libre mercado subproporcionará bienes con externalidades positivas, como la salud, el transporte público y la educación. Incluso los partidarios del capitalismo admiten que la provisión gubernamental de ciertos bienes y servicios públicos es esencial para maximizar el potencial de una sociedad capitalista.
Ciclos de auge y caída: Las economías capitalistas tienen una tendencia a los auges y las crisis con dolorosas recesiones y desempleo masivo.
Riqueza heredada y desigualdad de la riqueza: Una sociedad capitalista se basa en el derecho legal a la propiedad privada y en la capacidad de transmitir la riqueza a las generaciones futuras. Los capitalistas argumentan que una sociedad capitalista es justa porque uno obtiene las recompensas de su duro trabajo. Pero, a menudo, las personas son ricas, simplemente porque heredan la riqueza o nacen en una clase privilegiada. Por lo tanto, la sociedad capitalista no sólo no crea igualdad de resultados, sino que tampoco ofrece igualdad de oportunidades.