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El estilo de vida en Japón cambió drásticamente después de la Segunda Guerra Mundial, cuando un gran número de personas se trasladó del campo a las ciudades para ganarse la vida como oficinistas. A medida que las ciudades crecían tanto en tamaño como en población, cada vez más personas se desplazaban desde sus apartamentos o casas en los suburbios a sus lugares de trabajo en las zonas centrales. Mientras que un hogar japonés tradicional está formado por tres o más generaciones de la misma familia que viven bajo el mismo techo, los hogares urbanos de hoy en día suelen estar formados por los padres y los hijos, y los abuelos viven en otro lugar.

Vivienda

Las casas tradicionales japonesas son de madera y se apoyan en pilares de madera, pero las viviendas actuales suelen tener habitaciones de estilo occidental con suelo de madera y suelen estar construidas con pilares de acero. Además, cada vez más familias de las zonas urbanas viven en grandes edificios de apartamentos de hormigón armado.

Dos grandes diferencias con respecto a las casas occidentales son que no se llevan zapatos dentro de la casa y que al menos una habitación suele estar diseñada al estilo japonés con suelo de tatami. Los zapatos se quitan al entrar en la casa para mantener el suelo limpio. El genkan, o entrada, sirve como lugar para quitarse, guardar y ponerse los zapatos. La gente tiende a ponerse las zapatillas para interiores en cuanto se quita los zapatos.

Los tatamis son esteras hechas con una base gruesa de juncos y se utilizan en los hogares japoneses desde hace unos 600 años. Un solo tatami suele medir 1,91 por 0,95 metros, y el tamaño de las habitaciones suele medirse en función del número de tatamis. Un suelo de tatami es fresco en verano y cálido en invierno, y se mantiene más fresco que la alfombra durante los meses húmedos de Japón.

Comida

La palabra «comida» en japonés es gohan. Esta palabra se refiere en realidad al arroz al vapor, pero el arroz es un alimento tan importante para los japoneses que gohan ha llegado a significar todo tipo de comidas. Una comida tradicional japonesa consiste en una ración de arroz blanco, junto con un plato principal (pescado o carne), algún tipo de guarnición (a menudo verduras cocidas), sopa (a menudo sopa de miso) y verduras en escabeche. En 2013, la cocina tradicional japonesa «Washoku » fue inscrita en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, ya que representa el espíritu del pueblo japonés con su respeto por la naturaleza.

Los japoneses de hoy en día comen muchos platos de todo el mundo, especialmente de Europa, América del Norte y Asia. Además del arroz, los japoneses comen pan, fideos y pasta y disfrutan de una gran variedad de carnes, pescados, verduras y frutas. El sushi, la tempura, el sukiyaki y otras comidas japonesas famosas en el extranjero son, por supuesto, también populares en Japón.

En las ciudades, en particular, hay muchos restaurantes de comida rápida que ofrecen hamburguesas y pollo frito, que son especialmente populares entre los jóvenes y los niños.
Antes de comer, los japoneses dicen «itadakimasu», una frase de cortesía que significa «recibo esta comida». Esto expresa el agradecimiento a quien ha trabajado en la preparación de la comida. Después de comer, la gente vuelve a expresar su agradecimiento diciendo «gochiso sama deshita», que literalmente significa «Ha sido todo un festín».

Ropa

El vestido tradicional de Japón es el kimono. Los kimonos, que suelen ser de seda, tienen grandes mangas y llegan desde los hombros hasta los talones. Se atan con un cinturón ancho llamado obi. En la actualidad, los kimonos sólo se llevan en ocasiones especiales, como el festival Shichi-Go-San, las bodas y las ceremonias de graduación.

En comparación con la vestimenta occidental, el kimono tiende a limitar los movimientos y lleva más tiempo ponérselo correctamente. En verano, sin embargo, un kimono informal más fácil de llevar, conocido como yukata, es usado por niños y jóvenes en festivales, fuegos artificiales y otras ocasiones especiales. En la vida cotidiana, sin embargo, los jóvenes tienden a preferir la ropa que es más fácil de mover, como camisetas, pantalones vaqueros, polos y chándales.