Comúnmente conocida como Parálisis de Bell, la Parálisis del Séptimo Nervio causa una debilidad o parálisis repentina de los músculos de un lado de la cara. La afección puede estar causada por varios factores, como un trastorno inmunitario, el herpes zóster, la enfermedad de Lyme y otros virus, y en algunos casos es congénita. A menudo comienza como un dolor detrás de la oreja, y la extensión completa de los síntomas de la parálisis se produce en 48-72 horas. La dificultad para cerrar el ojo, el menor parpadeo y la sequedad ocular pueden causar dolor y deben ser tratados para minimizar el daño ocular. La musculatura facial que afecta al movimiento de los ojos y las cejas puede provocar un cambio en la forma del ojo.
¿Cómo se corrige la parálisis del séptimo nervio?
En la mayoría de los casos, la parálisis se resuelve por sí sola en varios meses. Sin embargo, la afección puede causar problemas con el ojo del lado afectado y se puede recomendar una pequeña cirugía de párpados para proteger el ojo de un daño mayor. El bótox puede utilizarse para tratar ciertos problemas, como la asimetría, pero debe utilizarse con mucho cuidado. Debido a la lesión del séptimo nervio, los tratamientos para corregir la funcionalidad o el aspecto estético del ojo requieren una formación oculoplástica especializada para reducir el riesgo de daños adicionales en el ojo y el nervio.