El intento de James Franco de adaptar la novela de Cormac McCarthy Blood Meridian ha sido desechado, y la razón parece un poco tonta. Aunque James Franco, que iba a coprotagonizar y dirigir la película, ya había reunido a un grupo de estrellas para la película, que incluía a Russell Crowe, ahora se ha archivado porque no se han conseguido los derechos de la novela. Un problema que se supone que se habría resuelto desde el principio del proyecto.
De forma bastante vergonzosa, la revelación de que Blood Meridian había quedado en segundo plano se produjo poco después de que se anunciara por primera vez la noticia de la película propuesta. Deadline había informado originalmente de que Blood Meridian se iba a comercializar en el mercado del Festival de Cine de Cannes, donde se pensaba que sería una de las películas más atractivas.
Pero se ha alegado que las noticias de última hora sobre la adaptación de Blood Meridian en realidad sabotearon y luego detuvieron las conversaciones entre los propietarios de los derechos del libro de Cormac McCarthy y el reparto. Anteriormente no sólo se había anunciado que IM Global y CAA se encargarían de las ventas internacionales y los derechos nacionales, respectivamente, de Meridiano de sangre en Cannes, sino que también se anunció deliciosamente que Russell Crowe y James Franco protagonizarían juntos la película.
Pero aunque el emparejamiento de estos dos actores maravillosamente intensos era suficiente para atraer inmediatamente la intriga hacia Meridiano de sangre, especialmente porque el material de origen fue escrito por el ganador del Premio Pulitzer Cormac McCarthy, el hecho de que el reparto se completara con Tye Sheridan (X-Men: Apocalipsis) y Vincent D’Onofrio (Jurassic World) lo hizo parecer aún más atractivo.
Meridiano de sangre también se estaba perfilando bastante bien detrás de las cámaras. No sólo el siempre mejorable James Franco estaba en la línea de dirección de la película, sino que su equipo de producción, formado por Cassian Elwes, Vince Jolivette y, en particular, Scott Rudin, tiene un tremendo historial de adaptaciones sensacionales. Rudin ha ayudado a llevar a la gran pantalla obras como Steve Jobs, Moneyball, Revolutionary Road, True Grit, Doubt, Fantastic Mr. Fox y The Social Network.
El último escollo en el proceso de adaptación cinematográfica de Blood Meridian deja el proyecto, una vez más, en el limbo. Escrita en 1985, Blood Meridian está ambientada en la década de 1850, en la frontera entre Texas y México, y gira en torno a las travesuras de un joven de 14 años de Tennessee, sólo conocido como Kid, que se ve envuelto en una banda de cazadores de cabelleras liderada por el juez Holden.
Desde el éxito de No es país para viejos, de los hermanos Coen, otro libro de Cormac McCarthy, los estudios han querido adaptar otras novelas del escritor. Blood Meridian lleva años en desarrollo. Por eso es una pena que, teniendo en cuenta el talento que tiene y lo cerca que estuvo de convertirse en realidad, esta encarnación haya sido archivada por una razón tan ridícula. Esperemos que pronto se encuentre una solución. Porque todo en esta versión propuesta de Blood Meridian parece perfecto.