La dermatitis del pañal es una zona roja, húmeda o rota en el culito de tu bebé.
La mayoría de los bebés tienen dermatitis del pañal en algún momento, pero algunos son más sensibles que otros. La piel de tu bebé debe estar limpia y seca para ayudar a prevenir la dermatitis del pañal.
Si el culito de tu bebé tiene rojeces o manchas:
- cámbialo más a menudo
- dale tiempo sin pañal
Causas de la dermatitis del pañal
La dermatitis del pañal puede ocurrir cuando:
- tu bebé se deja demasiado tiempo con un pañal sucio o mojado
- un pañal rugoso roza a tu bebé
- tu bebé tiene una infección de muguet
- su piel es sensible a un jabón productos de baño o detergentes como el jabón en polvo
- utilizas toallitas para bebés que contienen alcohol
- si a tu bebé le están saliendo los dientes
- si tu bebé o niño pequeño ha tomado recientemente antibióticos
Cómo curar la dermatitis del pañal
Lávate siempre las manos antes y después de cambiar el pañal de tu bebé. Utiliza un algodón y agua para limpiar la piel de tu bebé. Procura no utilizar toallitas húmedas hasta que tu bebé tenga entre 2 y 4 semanas.
Lava suavemente el culito de tu bebé y sécalo con palmaditas en cada cambio de pañal. Deja el pañal sin usar durante media hora y expón la piel al aire libre, en la medida de lo posible.
Añade una fina capa de crema protectora. Su farmacéutico, enfermera de salud pública o médico de cabecera pueden recomendarle una.
No utilice baños de burbujas, polvos de talco ni productos perfumados con su bebé. A veces puede ser útil dar al bebé sus líquidos nocturnos antes de tiempo. Esto significa que el pañal puede no estar tan húmedo durante la noche.
No apliques nunca huevo crudo ni ningún otro alimento directamente sobre la piel rota.
Acude a tu médico de cabecera si tu bebé o niño pequeño tiene molestias. Su médico de cabecera puede recetarle una pomada para ayudar a curar la dermatitis del pañal.
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Preocupaciones por el hábito intestinal
Consulta a tu médico de cabecera si tu bebé tiene alguno de los siguientes síntomas:
- dolor intenso y angustia al defecar
- sangre en las heces de su bebé
- fiebre
- vómitos
- estreñimiento
- Diarrea con sangre
- Panza hinchada
- Falta de desarrollo
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