Sulfasalazina

¿Qué es la sulfasalazina?

La sulfasalazina (nombres comerciales Pyralin EN, Salazopyrin EN) es un medicamento utilizado para tratar la artritis reumatoide. También puede utilizarse para tratar otras enfermedades como la artritis psoriásica, la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.

Es una combinación de un componente antiinflamatorio similar a la aspirina y un componente antibiótico similar al azufre.

No está claro cómo actúa la sulfasalazina. Parece tener efectos antiinflamatorios y reducir la actividad del sistema inmunitario. En la artritis reumatoide, estas acciones ayudan a reducir la inflamación en las articulaciones y, por tanto, a reducir el dolor y la hinchazón. También limita el daño a las articulaciones y ayuda a prevenir la discapacidad a largo plazo.

Debido a que la sulfasalazina actúa para reducir el daño a las articulaciones, en lugar de sólo aliviar el dolor, pertenece al grupo de medicamentos denominados fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FAME).

¿Qué beneficio puede esperar de su tratamiento?

Entre el 50 y el 70% de las personas tratadas con sulfasalazina responden bien al tratamiento.

La sulfasalazina no funciona de inmediato. La mejora de los síntomas se produce gradualmente a partir de unas 6 a 12 semanas después de comenzar el tratamiento.

Se pueden administrar otros medicamentos para mejorar sus síntomas mientras se espera a que la sulfasalazina haga efecto.

¿Cómo se toma la sulfasalazina?

La sulfasalazina se toma por vía oral en forma de comprimidos. Por lo general, se toma dos veces al día, pero también puede tomarse como una dosis única diaria.

Hay dos tipos de comprimidos disponibles: simples y con recubrimiento entérico. El comprimido con recubrimiento entérico (Pyralin EN y Salazopyrin EN) se prescribe normalmente porque puede tener menos efectos secundarios.

Los comprimidos con recubrimiento entérico deben tomarse con o después de las comidas con un vaso de agua. No deben romperse, triturarse ni masticarse.

El tratamiento se inicia lentamente, con un comprimido (500 mg) o dos comprimidos al día. La dosis se aumenta cada semana. La dosis de mantenimiento habitual es de dos comprimidos dos veces al día.

La sulfasalazina puede utilizarse con otros medicamentos para la artritis, incluyendo:

otros DMARDs como el metotrexato
medicamentos corticosteroides como la prednisolona o las inyecciones de cortisona en la articulación
medicamentos antiinflamatorios (AINE) como el naproxeno (Naprosyn) o el ibuprofeno (Brufen/Nurofen)
medicamentos para el dolor como el paracetamol.

¿Durante cuánto tiempo se continúa el tratamiento?

El tratamiento con sulfasalazina puede continuarse indefinidamente siempre que sea eficaz y no se produzcan efectos secundarios graves.

Si interrumpe el tratamiento con sulfasalazina durante más de unas semanas existe el riesgo de que su enfermedad empeore. Continúe con su tratamiento a menos que se lo aconseje su médico o que aparezcan efectos secundarios.

¿Existen efectos secundarios?

Puede experimentar efectos secundarios con su tratamiento. Informe a su médico si le preocupan los posibles efectos secundarios.

Una reducción de la dosis puede minimizar los efectos secundarios para que pueda seguir tomando este tratamiento. Su médico le aconsejará sobre cualquier cambio de dosis que sea necesario.

Posibles efectos secundarios más frecuentes

Los efectos secundarios más frecuentes son la pérdida de apetito y las náuseas (sensación de malestar). Se producen al principio del tratamiento y afectan hasta a un tercio de las personas. Pueden minimizarse comenzando con una dosis baja y aumentándola gradualmente.
El reflujo, la diarrea y el dolor abdominal también son bastante frecuentes.
La sulfasalazina suele hacer que su orina y su transpiración adquieran un color anaranjado. La mayoría de las prendas de vestir se borran, pero algunos tejidos de nailon se manchan. Las lentes de contacto, especialmente las blandas de uso prolongado, pueden mancharse permanentemente. Estos son cambios normales y no significan que esté teniendo una reacción al medicamento.
Alrededor del 10% de las personas que toman sulfasalazina pueden desarrollar un dolor de cabeza o un ligero mareo. La reducción de la dosis puede reducir estos efectos.
Todos los medicamentos que contienen azufre pueden causar erupciones en la piel, que pueden producir picor, así como úlceras en la boca. Esto puede ocurrir en alrededor del 10% de las personas. Por lo general, se resuelve con bastante rapidez una vez que se deja de tomar el medicamento. Si ha tenido problemas en el pasado con medicamentos que contienen azufre, por ejemplo Bactrim o Septrim, o cree que puede haber tenido problemas, hágaselo saber a su médico.
Los medicamentos con azufre también pueden causar temperatura, lo que se conoce como «fiebre medicamentosa».

Efectos secundarios menos frecuentes o raros

Los zumbidos en los oídos, la dificultad para pensar, los cambios de personalidad y la depresión son efectos secundarios ocasionales.
En los varones, puede producirse una disminución del recuento de espermatozoides que puede dar lugar a una infertilidad temporal. En la mayoría de los casos esto es reversible al dejar de tomar sulfasalazina.
Algunas personas pueden notar una mayor sensibilidad al sol. Es una buena idea aplicarse un protector solar y llevar un sombrero cuando esté al sol.
Cuentas sanguíneas: La sulfasalazina puede causar un descenso en el número de glóbulos blancos, que son necesarios para combatir las infecciones. Los análisis de sangre periódicos pretenden detectar este problema de forma precoz. Si desarrolla dolor de boca, úlceras bucales, infección o fiebre, informe a su médico inmediatamente.
Las personas con un trastorno hereditario de la sangre llamado deficiencia de G6PD tienen un riesgo significativo de sufrir problemas en el recuento sanguíneo cuando toman sulfasalazina. Este trastorno es más frecuente en personas originarias de África (incluidos los afroamericanos), la región mediterránea y el sudeste asiático.
Inflamación del hígado: También puede producirse hepatitis (inflamación del hígado). Suele ser leve y no produce síntomas, por lo que es importante realizar análisis de sangre periódicos. El problema se resuelve si se interrumpe el tratamiento.
Otros efectos poco frecuentes incluyen inflamación pulmonar reversible y hormigueo en manos y pies.

¿Qué precauciones son necesarias?

Análisis de sangre

Dado que la sulfasalazina puede afectar a las células de la sangre y al hígado, debe realizarse análisis de sangre regulares durante su tratamiento. Esto es importante, ya que es posible que no presente síntomas con estos problemas.
Los análisis de sangre son especialmente importantes durante los primeros meses de tratamiento y cuando la sulfasalazina se toma con metotrexato y/o leflunomida.
Además de controlar los efectos secundarios, los análisis de sangre ayudan a controlar su estado para determinar si el tratamiento es eficaz.
El recuento sanguíneo y las pruebas de la función hepática son necesarios cada 2 ó 3 semanas durante los primeros 3 meses y después de 3 a 6 meses.
Su médico de cabecera (GP) será informado sobre el programa de control. Es importante que acuda a su médico de cabecera si se lo han pedido, ya que tiene un papel importante en el seguimiento de su enfermedad.

Precauciones con otras enfermedades o afecciones

No debe tomar sulfasalazina si tiene sensibilidad a los compuestos de la aspirina o a los medicamentos que contienen azufre, como los antibióticos azufrados (por ejemplo, Bactrim o Septrim).p. ej. Bactrim o Septrim).
Si tiene trastornos sanguíneos, renales o hepáticos, su médico analizará su historial médico para decidir si este tratamiento es adecuado para usted.

Uso con otros medicamentos

La sulfasalazina puede interaccionar con otros medicamentos. Debe informar a su médico (incluyendo a su médico de cabecera, reumatólogo y otros) sobre todos los medicamentos que esté tomando o piense tomar. Esto incluye los medicamentos de venta libre o a base de hierbas/naturopatía. También debe mencionar su tratamiento a otros profesionales de la salud.
La sulfasalazina puede interferir con la warfarina (Coumadin, Marevan) un medicamento anticoagulante. Puede ser necesario ajustar la dosis si se toman estos dos medicamentos juntos.
La sulfasalazina puede interferir con la digoxina, por lo que puede ser necesario ajustar la dosis si se toman estos dos medicamentos juntos.
Los antiácidos pueden retrasar la absorción de la sulfasalazina. No tome antiácidos en las 2 horas siguientes a la toma de sulfasalazina.
La sulfasalazina se utiliza a menudo con otros DMARDs para tratar la artritis reumatoide. La terapia combinada es ahora una práctica estándar. No suele haber más efectos secundarios que con un único FAME.
La sulfasalazina puede aumentar el riesgo de lesión hepática si se administra con isoniazida, un medicamento utilizado para la tuberculosis.
La mayoría de las vacunas pueden administrarse de forma segura con sulfasalazina.
Hable con su reumatólogo antes de recibir cualquier vacuna.

Uso con alcohol

Debido a que la sulfasalazina puede afectar a su hígado, debe evitar el consumo excesivo de alcohol mientras lo esté tomando.
No se sabe con exactitud qué nivel de consumo de alcohol es seguro cuando se toma sulfasalazina.
Sin embargo, existe un acuerdo general de que es poco probable que una o dos bebidas estándar tomadas una o dos veces por semana causen un problema.
Se desaconseja encarecidamente beber más de 4 bebidas estándar en una ocasión, aunque sea con poca frecuencia.

Uso en el embarazo y la lactancia

La sulfasalazina se ha utilizado con seguridad en el embarazo y la lactancia. Si desea quedarse embarazada o tiene intención de dar el pecho, debe consultarlo con su médico.

Cómo conservar la sulfasalazina

Conserve la sulfasalazina en un lugar fresco y seco, alejado del calor y la luz directos (por ejemplo, no en el cuarto de baño).
Mantenga todos los medicamentos fuera del alcance de los niños.

Cosas importantes que debe recordar

Mientras tome sulfasalazina debe acudir a su reumatólogo regularmente para asegurarse de que el tratamiento está funcionando y para minimizar cualquier posible efecto secundario.
Si le preocupa algún efecto secundario debe ponerse en contacto con su reumatólogo lo antes posible.
Es importante que se haga regularmente los análisis de sangre que le indique su médico.

Esta información ha sido elaborada por la Asociación Australiana de Reumatología (ARA) para ayudarle a comprender el medicamento que se le ha recetado. Por favor, léala con atención y coméntela con su médico. La información contenida en esta hoja se ha obtenido de diversas fuentes y ha sido revisada por la ARA. Está pensada como ayuda educativa y no cubre todos los posibles usos, acciones, precauciones, efectos secundarios o interacciones de los medicamentos mencionados. Esta información no pretende ser un consejo médico para problemas individuales ni para hacer una evaluación individual de los riesgos y beneficios de tomar un medicamento concreto. Puede ser reproducida en su totalidad, pero no puede ser modificada sin permiso de la ARA. La publicación del NHMRC: How to present the evidence for consumers: preparation of consumer publications (2000) se utilizó como guía para elaborar esta publicación.