¿Qué es?
La vitamina K es una vitamina que se encuentra en las verduras de hojas verdes, el brócoli y las coles de Bruselas. El nombre de vitamina K proviene de la palabra alemana «Koagulationsvitamin.»
Varias formas de la vitamina K se utilizan en todo el mundo como medicina. Pero en los EE.UU., la única forma disponible es la vitamina K1 (fitonadiona). La vitamina K1 es generalmente la forma preferida de la vitamina K, ya que es menos tóxica, trabaja más rápido, es más fuerte y funciona mejor para ciertas afecciones.
En el cuerpo, la vitamina K juega un papel importante en la coagulación de la sangre. Por lo tanto, se utiliza para revertir los efectos en los casos en que se dan demasiado medicamentos para «adelgazar la sangre»; para evitar los problemas de coagulación en los recién nacidos que no tienen suficiente vitamina K; y para tratar el sangrado causado por medicamentos como los salicilatos, las sulfonamidas, la quinina, la quinidina o los antibióticos. La vitamina K se usa también para el tratamiento y la prevención de la deficiencia de vitamina K, un problema que ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente vitamina K. También se usa para prevenir y tratar la debilidad en los huesos (osteoporosis) y para aliviar la picazón que a menudo acompaña a una enfermedad del hígado llamada cirrosis biliar.
La gente aplica la vitamina K a la piel para eliminar las venas finitas en la piel, los hematomas, las cicatrices, las estrías y las quemaduras. También se utiliza por vía tópica para tratar la rosácea, un problema de la piel que produce enrojecimiento y granos en la cara. Después de la cirugía, la vitamina K se utiliza para acelerar la cicatrización de la piel y disminuir los moretones y la hinchazón.
Los proveedores de salud también dan vitamina K por inyección para tratar los problemas de coagulación.
Una mayor comprensión del papel que juega la vitamina K en el cuerpo más allá de la coagulación sanguínea ha llevado a algunos investigadores a sugerir que se aumente la cantidad recomendada de vitamina K en la dieta. En el año 2001, el Instituto Nacional de Medicina, Alimentos y Nutrición aumentó levemente la cantidad de vitamina K recomendada, pero se negó a hacer mayores aumentos. Explicaron que no existe suficiente evidencia científica para hacer grandes aumentos en la cantidad recomendada de vitamina K.
Natural Medicines Comprehensive Database (La Base Exhaustiva de Datos de Medicamentos Naturales) clasifica la eficacia, basada en evidencia científica, de acuerdo a la siguiente escala: Eficaz, Probablemente Eficaz, Posiblemente Eficaz, Posiblemente Ineficaz, Probablemente Ineficaz, Ineficaz, e Insuficiente Evidencia para Hacer una Determinación.
La clasificación de la eficacia para este producto es la siguiente:
Eficaz para…
- El tratamiento y la prevención de la deficiencia de vitamina K.
- La prevención de algunas hemorragias o problemas de coagulación sanguínea.
- Revertir los efectos al haber usado demasiada warfarina para prevenir la coagulación sanguínea.
Insuficiente Evidencia para Hacer una Determinación para…
- Los huesos débiles (osteoporosis). Hasta el momento, hay desacuerdo en los resultados de las investigaciones sobre los efectos de la vitamina K en la resistencia ósea y el riesgo de fracturas en las personas con osteoporosis.
- La fibrosis quística.
- Las enfermedades del corazón.
- El colesterol alto.
- Las várices.
- Los hematomas.
- Las cicatrices.
- Las estrías.
- Las quemaduras.
- La hinchazón.
- Otras afecciones.
Se necesitan más pruebas para poder evaluar la eficacia de la vitamina K para estos usos.
La vitamina K es una vitamina esencial que el cuerpo necesita para la coagulación sanguínea y otros procesos importantes.
La vitamina K es segura para la mayoría de la gente. La mayoría de las personas no experimentan efectos secundarios cuando toman la cantidad diaria recomendada.
Advertencias y precauciones especiales:
Embarazo y lactancia: Cuando se toma la cantidad recomendada diaria, la vitamina K se considera segura para las mujeres embarazadas y las mujeres amamantando, pero no use cantidades superiores sin el consejo de su médico.
Enfermedad renal: El exceso de vitamina K puede ser perjudicial si usted está recibiendo tratamiento de diálisis debido a una enfermedad renal.
Enfermedad hepática: La vitamina K no es eficaz para el tratamiento de los problemas de coagulación causado por la enfermedad grave del hígado. De hecho, las dosis altas de vitamina K pueden empeorar los problemas de coagulación en estas personas.
Warfarina (Coumadin)
Grado de interacción = Serio No tome esta combinación
La vitamina K es utilizada por el organismo para la coagulación de la sangre. La warfarina (Coumadin) se utiliza para retardar la coagulación sanguínea. Al ayudar a la coagulación de la sangre, la vitamina K puede disminuir la eficacia de la warfarina (Coumadin). Asegúrese de controlar su sangre con regularidad. La dosis de warfarina (Coumadin) puede ser que necesite ser cambiada.
Coenzima Q-10
La coenzima Q-10 es químicamente similar a la vitamina K, y como la vitamina K, puede promover la coagulación de la sangre. El uso de estos dos productos juntos, puede promover más la coagulación de la sangre que cuando se usa uno solo. Esta combinación puede ser un problema para la gente que está tomando warfarina para retardar la coagulación sanguínea. La coenzima Q-10 junto con la vitamina K pueden abrumar los efectos de la warfarina y podrían permitir que la sangre coagule.
Tiratricol
Hay una preocupación de que el Tiratricol podría interferir con el papel que juega la vitamina K en la coagulación de la sangre.
Vitamina A
En los animales, las dosis altas de vitamina A interfieren con la capacidad de la vitamina K para coagular la sangre. Pero no se sabe si esto también ocurre en las personas.
Vitamina E
Las dosis altas de vitamina E (por ejemplo, más de 800 unidades/día) pueden hacer que la vitamina K sea menos eficaz para la coagulación de la sangre. En las personas que toman warfarina para evitar que la sangre coagule, o en las personas que tienen una ingesta baja de vitamina K, las dosis elevadas de vitamina E puede aumentar el riesgo de hemorragia.
No se conoce ninguna interacción con alimentos.
Las siguientes dosis han sido estudiadas en investigaciones científicas:
POR VÍA ORAL:
- Para los trastornos de la coagulación como la hipoprotrombinemia: 2.5-25 mg de vitamina K1 (fitonadiona).
- Para contrarrestar el sangrado que puede ocurrir cuando se da un exceso del anticoagulante warfarina: Normalmente se usa 1-5 mg de vitamina K, sin embargo, la dosis exacta que se necesita es determinada por una prueba de laboratorio llamada INR.
No hay suficiente información científica para determinar La Ingesta Diaria Recomendada (RDA) de vitamina K. En su lugar se han hecho recomendaciones de La Ingesta Adecuada Diaria (AI): Las AIs son: para los infantes de 0-6 meses, 2 mcg; para los infantes de 6-12 meses, 2,5 mcg; para los niños de 1-3 años, 30 mcg; para los niños de 4-8 años, 55 mcg; para los niños de 9-13 años, 60 mcg; para los adolescentes de 14-18 años (incluidos las que están embarazadas o amamantando), 75 mcg; para los hombres mayores de 19 años, 120 mcg; para las mujeres mayores de 19 años (incluidos las que están embarazadas y amamantando), 90 mcg.
4-Amino-2-Methyl-1-Naphthol, Fat-Soluble Vitamin, Menadiol Acetate, Menadiol Sodium Phosphate, Menadione, Ménadione, Menadione Sodium Bisulfite, Menaquinone, Ménaquinone, Menatetrenone, Menatétrenone, Phytonadione, Methylphytyl Naphthoquinone, Phylloquinone, Phytomenadione, Vitamine K, Vitamine Liposoluble, Vitamine Soluble dans les Graisses.