El afeitado puede ser realmente duro para la piel delicada, incluida la que rodea los genitales. Esto es válido tanto para los chicos como para las chicas. Aunque la mejor manera de evitar las erupciones del afeitado es no afeitarse en absoluto -o, como alternativa, utilizar maquinillas que dejen una pequeña cantidad de pelo, lo que irrita menos la piel-, hay algunas cosas que puedes hacer para evitar la irritación si vas a afeitarte.
En primer lugar, asegúrate siempre de lavarte la piel con jabón antes. Lo mejor es utilizar un jabón suave (como el jabón Dove) con agua tibia (que ayuda a relajar la piel y los folículos pilosos). A continuación, utiliza una crema de afeitar. Siempre que sea posible, aféitate con una cuchilla de afeitar nueva, ya que las cuchillas viejas pueden irritar la piel.
Aféitate siguiendo la veta del pelo. La forma más fácil de averiguar en qué dirección va el vello en una zona concreta es pasar los dedos por el vello en todas las direcciones. La forma más suave es la que va «a favor de la fibra». El afeitado «a contrapelo» (la dirección opuesta a la de «a favor de la fibra», que es la que se siente más áspera cuando pasas los dedos en todas las direcciones) tira de la piel y puede causar mellas. Después de afeitarse, no es mala idea aplicarse una loción ligera y sin perfume que esté catalogada como «no comedogénica» (es decir, que no provoque bultos).
Como siempre, informe a su proveedor de atención médica si desarrolla alguna erupción o síntomas preocupantes. No dude en buscar atención médica rápidamente si presenta enrojecimiento, calor o sensibilidad en la zona, ya que pueden ser signos tempranos de infección.