El clásico pesto casero es insuperable, así que deja de lado el comprado y prepara una tanda en tu cocina. Todo lo que necesitas es un par de ingredientes simples y estarás haciendo este sabroso alimento básico de verano lleno de albahaca en poco tiempo. (Y por «poco tiempo», me refiero a 5 minutos o menos).
Si alguna vez hubo una forma mejor de utilizar una gran fanega de albahaca, no conozco ninguna. Y no es por falta de intento de idear algo. Tengo dos plantas de albahaca gigantes en el exterior, acercándose cada vez más a la casa y acaparando todo el espacio de mi jardín, y no hay nada que se me ocurra para vencerlas, aparte de mi duodécima tanda de pesto de este verano.
Se podría decir que están destinadas al pesto. O no.
Así que antes de que estas plantas se pongan en plan «Aliméntame, Seymour», vuelvo a sacar el robot de cocina para compartir por fin cómo hago el pesto con vosotros.
¿Qué es el pesto?
Si nunca has probado el pesto, debes saber, en primer lugar, que te lo has perdido. En segundo lugar, debes saber que es un poco difícil de explicar para un plato tan sencillo, probablemente porque es muy versátil. Es un condimento que puede usarse como salsa, para untar o para mojar, aunque probablemente se sirva más comúnmente con la pasta.
Técnicamente, el pesto puede venir en muchas variedades, hecho con un montón de ingredientes diferentes, pero el más popular (y la versión OG) es un tipo verde, herbal, con ajo, mágico llamado Pesto Alla Genovese. El Pesto Alla Genovese -que es la versión que preparo con esta receta- se compone de albahaca fresca, piñones, ajo, queso parmesano o pecorino, sal y pimienta, y aceite de oliva, todo ello mezclado en un glorioso brebaje de color verde brillante.
El Pesto Alla Genovese recibió su nombre porque se originó en Génova, Italia. La palabra «pesto» es el pasado del verbo genovés «pestare», que significa «machacar», lo que tiene mucho sentido cuando se sabe que todos los ingredientes se machacan tradicionalmente con un mortero y una maja.
Por cierto, si tiene un mortero y una maja a mano, ¡no dude en sacarlos para esta receta de pesto de albahaca! A mí me gusta ir por el camino de la pereza, es decir, de la eficiencia, y utilizar un procesador de alimentos, pero tienes opciones.
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POSIBLES SUSTITUTOS
Soy un firme creyente de que los mejores ingredientes del pesto son los tradicionales, pero los segundos mejores ingredientes del pesto son los que tienes. Si la receta no es factible para ti exactamente como está escrita, no pasa nada, aquí se trata de versatilidad. Aunque no será un auténtico Pesto Alla Genovese, seguirá estando delicioso, y eso es lo que más importa.
Aquí tienes algunas posibles sustituciones que podrían interesarte:
- Cambia las hojas de albahaca por otras verduras de hoja verde. Las espinacas, la col rizada o incluso el cilantro (en una versión de inspiración mexicana) pueden ser buenas alternativas a la albahaca.
- Deshágase de los piñones. Los piñones son caros, por lo que algunas personas prefieren cambiarlos por alternativas más baratas. Las nueces son mis favoritas, al igual que los pistachos (como en este pilaf de pesto con menta y pistachos). Y si buscas una receta de pesto totalmente libre de frutos secos, considera las semillas de girasol en su lugar. Aunque los piñones son técnicamente semillas y no frutos secos, generalmente se aconseja evitarlos también si se es alérgico a los frutos secos.
- No consuma productos lácteos. El queso parmesano es una parte muy importante del pesto, aportando su distintivo sabor salado y añejo, pero aún puedes tener una receta sabrosa sin él, lo creas o no. Puedes omitirlo por completo y aumentar la cantidad de piñones, ajo y sal para compensarlo, o simplemente sustituirlo por unas cucharadas de levadura nutricional apta para veganos.
- Alucina con algunos complementos. Ya conoces la fórmula básica de hierbas + frutos secos + ajo + queso + aceite, ¿verdad? Pero, ¿qué quiere decir que no puedes hacer algo raro con tu receta de pesto? Mezclar pimientos (como chipotles en adobo), zumo de limón o tomates secos puede añadir un poco más de emoción a tu salsa.
¿Cuánto tiempo dura el pesto casero en la nevera?
Puedes guardar el pesto casero en tarros o recipientes herméticos y mantenerlos en la nevera durante una semana aproximadamente antes de que se estropeen.
Si no te vas a comer todo el pesto en una semana (o si te gusta tenerlo siempre a mano) también puedes congelar tu pesto hasta 6 meses. A mí me gusta congelar el mío en bandejas de cubitos de hielo para poder descongelar un poco cada vez que quiero.
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Cómo hacer un PESTO VÍDEO
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Ingredientes
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- 2 1/2 tazas de hojas de albahaca fresca, empaquetadas
- 1/2 taza de queso parmesano recién rallado
- 3 dientes de ajo grandes
- 1/4 de taza de piñones
- 1/2 taza de aceite de oliva virgen extra, o según sea necesario
- Sal y pimienta negra, al gusto
Instrucciones
- En el bol de un procesador de alimentos, combine las hojas de albahaca, el queso parmesano, el ajo y los piñones. Procese hasta que esté muy bien picado.
- Con el procesador de alimentos todavía en funcionamiento, añada lentamente el aceite de oliva y continúe procesando hasta que esté bien combinado con la consistencia deseada. Sazonar con sal y pimienta, al gusto, y remover una vez más para combinar.